martes, 7 de octubre de 2014

MÉTODO LÓGICO Y FICCIÓN; INGENIO Y CREATIVIDAD.






































Muy brevemente –exigiría una mayor explicación- podemos contestar a la siguiente pregunta: ¿existen métodos para proyectar? En realidad no, o al menos nadie los enseña en las escuelas de Arquitectura. Sí existen estrategias proyectuales, o formas de aproximarse a la solución de un proyecto. Si proyectar consiste en resolver, podemos considerar dos caminos: el método lógico o en último caso inventarse un problema inexistente y resolverlo, una ficción.

El método lógico, como en las disciplinas científicas, consiste en establecer la sustancia real de un problema. El éxito en la respuesta dependerá en gran medida de su formulación, en la determinación de las necesidades reales, y en definitiva de nuestra capacidad de respuesta según nuestra cultura y nuestra formación.

“if I had a hour to solve a problem and my life depend on the solution, I would spend the first fifty-five minutes determining the proper question, I could solve the problem in less than five”, Albert Einstein.

Aprendiendo a reformular problemas aumentamos nuestra capacidad de respuesta, y nuestra creatividad, así lo explica Tina Seelig en su libro “InGenius, A Crash Course on Creativity”,

What is the sum of 5 plus 5? or what two numbers add up to 10? The first question has only one right answer, and the second question has an infinite number of solutions (…) These two problems, which rely on simple addition, difer only in the way they are framed.
Mastering the ability to reframe problems is an important tool for increase your imagination because it unlocks a vast away of solutions with experience it becomes quite natural.

Varios ejemplos podrían ayudarnos a entenderlo: el Gimnasio Maravillas de Alejandro de la Sota; la casa museo de Sir John en Londres; la plaza de la estación ferroviaria de Sants de Albert Viaplana y Helio Piñon en Barcelona; la biblioteca en Seattle de Rem Koolhaas.

Sota proyecta el Gimnasio Maravillas –su obra maestra- con extrema facilidad respondiendo a las estrictas necesidades del enunciado de un problema, lo que podríamos denominar método lógico. El proyecto consiste en la ampliación de un colegio con un programa amplio, en un espacio reducido. En cambio proyecta con gran dificultad el Gobierno Civil de Tarragona, un edificio con una mayor función de representativa y menor carga funcional.

Soane en su casa museo de Londres se inventa una ficción. Un monje habita su casa. Proyecta en la zona de invitados una celda. La leyenda cuenta que después de la muerte de su esposa, cae gravemente enfermo y habita como un fantasma en esas estancias.

Viaplana y Piñon reciben el encargo de proyectar la plaza de Sants en un solar muy difícil, un descampado. El contexto no es muy claro, una gran superficie horizontal, un desierto en el que no resultaba fácil establecer los términos del problema y entonces se inventan una ficción. El espacio de la plaza se plantea con temas en común en el libro Alicia en el País de las Maravillas.

Otras estrategias proyectuales más complejas se pueden ilustrar con proyectos como la biblioteca en Seattle de Rem Koolhaas. El diseño de la biblioteca depende de la consideración de uso del libro. ¿Cuál es el futuro de los libros? La reinvención de biblioteca como punto de acceso a la información hace de la biblioteca un recorrido ascendente espiral rodeado de estanterías de libros distribuidos temáticamente según el foco de interés; grandes espacios de lectura y ocio iluminados con luz natural provistos de todos los medios digitales; una estructura flexible en futuras ampliaciones.

Tuñón y Mansilla proyectan la Cúpula de la Energía -Edificio Institucional de la Ciudad del Medio Ambiente e Soto de Garray (Soria)– con una estrategia singular, de forma experimental como el desarrollo de la fragmentación y desplazamiento de los elementos que resultan del corte de una cúpula semiesférica.


Víctor Corostola



Tina Seelig (Professor of the Practice, Stanford) 
“InGenius, A Crash Course on Creativity”. Harperone, 2012.